Recién llegado a Logroño, sobre el césped en el primer entrenamiento con el grupo, Dani Giménez muestra sus primeras impresiones tras su fugaz fichaje, la ilusión con la que aterriza en la entidad blanquirroja y la confianza en el grupo.
– ¿Qué supone para ti estar en un club como el Logroñés?
– Algo muy bonito. Una oportunidad para volver a jugar y de volver un poco la confianza. Por circunstancias no encontré un destino adecuado en el que podría llegar a estar a gusto y estaba esperando al mercado de enero… La verdad que ha sido todo muy rápido, una llamada de mi agente y en un día o menos lo hemos cerrado todo. Pero, sobre todo, estoy muy ilusionado y muy contento por ayudar al equipo.
– ¿Qué te parece la actual Segunda División?
– Es un escenario muy diferente. Es consecuencia de lo que vivimos el año pasado con el COVID-19, hay muchísima igualdad, pero el hecho de jugar sin público y con la incertidumbre de que siempre puede haber alguien contagiado en tu equipo le da un poquito más de dificultad a todo esto. Hay que poner en valor lo que están haciendo los jugadores, el cuerpo técnico y los equipos.
– ¿Qué esperas aportar al club?
– Ilusión, trabajo y profesionalidad. Intentar mantener esta buena dinámica, el vestuario es un muy buen vestuario, compañeros muy amables que me han acogido muy bien y seguir con esa buena dinámica de estar donde estamos, en una zona de la tabla sin peligro y siempre mirando un poquito más hacia arriba. Con los pies en el suelo, pero creo que el equipo tiene mucho potencial para pelear.
– ¿Cuál es tu objetivo?
– Aprovechar las oportunidades y ayudar al club. Tengo experiencia, he pasado muchísimas situaciones y en todo tipo de circunstancias, tanto buenas como malas, y creo que puedo aportar bastante a todos los compañeros. Con un grupo unido siempre es más fácil conseguir buenos resultados, así que espero tener buena conexión con el grupo y como el Logroñés ya lo está demostrando, aportar para que estos buenos resultados sigan así.
