La Unión Deportiva Logroñés afronta un nuevo fin de semana con un complejo reto por delante: en Lezama, frente al Bilbao Athletic, en un partido que se supone clave para el devenir de las aspiraciones blanquirrojas. En la rueda de prensa previa a dicho encuentro, correspondiente a la vigésimo primera jornada de Primera Federación, el entrenador de la UD Logroñés, Natxo González, comenzaba su comparecencia ante los medios de comunicación reconociendo la necesidad de sumar tres puntos, siendo este un partido “de sí o sí, al menos a nivel personal”.
Advirtiendo del peligro y el respeto que el míster profesa a los equipos filiales, Natxo González ha explicado que un filial es sinónimo de frescura, talento y velocidad, por lo que espera un partido difícil donde “ambos equipos muestren su necesidad”. “Sé que va a ser un partido complicado pero como lo son todos llegado a este momento de la temporada. Lo que tiene que imperar es nuestro juego, sin caer en la precipitación y sabiendo gestionar la necesidad, haciéndolo mejor que el rival para tener opciones de ganar”, detallaba.
Cuestionado acerca de la disponibilidad de la plantilla y posibles nuevas incorporaciones, Natxo ha subrayado que un equipo es un colectivo donde se necesitan los unos a los otros, si bien cuando no están los unos, “será el momento de los otros para hacerlo lo mejor posible”. Siempre con el significado de que el colectivo está por delante y que se trabaja por un objetivo común, el técnico ha asegurado: “Tenemos lo que tenemos, confiamos en lo que tenemos y vamos a muerte con ello. Esto lo tenemos que sacar todos juntitos, superando todas las adversidades que nos surjan a lo largo de la temporada”.
El debe: mejora en el registro ofensivo
“Cuando uno está enfermo, lo primero es el diagnóstico. Tenemos gran capacidad de autoconocimiento y tenemos muy claro en qué estamos siendo buenos y en qué tenemos que mejorar”, admitía Natxo. Al entrenador de la UD Logroñés no le ha importado reconocer el buen hacer a nivel defensivo, siendo importante el hecho de mantener la estabilidad de los últimos encuentros, a la vez que ha distinguido el matiz que el debe del equipo está a nivel ofensivo. “Haciendo balance los últimos partidos, lo sabemos y estamos incidiendo mucho para mejorar en ese aspecto y aumentar nuestras posibilidades de ganar”.
“Ese último pase, ese último centro, ese último movimiento o esa última decisión… ahí es donde tenemos capacidad de mejora y, para eso, el día a día nos tiene que marcar esa exigencia”. El técnico terminaba la rueda de prensa recordando que el vestuario tiene gran actitud, “pero con esa actitud no es suficiente, así que vamos a dar un salto cualitativo a nivel individual para que todo eso que estamos habiendo bien se transforme en ocasiones, y con algo de fortuna, en goles y victorias”.
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