La Unión Deportiva Logroñés inició sus visitas a centros escolares riojanos en Nuestra Señora de la Piedad, en Nájera, uno de los bastiones blanquirrojos de la comunidad, con su propia peña y numerosos aficionados que acuden a Las Gaunas desde el municipio. Un najerino, Pablo Bobadilla, y Álvaro Mateo fueron los primeros futbolistas en participar en una de las iniciativas más entrañables y con más tradición de la entidad. Les acompañó Eduardo Valdovinos, responsable de la cantera del Logroñés. Los tres hablaron de la importancia de los estudios, de unos buenos hábitos alimenticios y de una vida saludable.
Les esperaban alumnos de 4º y 5º de Primaria, “muy contentos” por recibir a los jugadores, a quienes bombardearon a preguntas y desearon “ascender a Primera RFEF”. Pablo y Álvaro firmaron autógrafos, hubo tiempo para fotos y se hizo entrega de entradas para el duelo contra el Alavés B y un obsequio del club al ganador de un concurso con un cuestionario de diez curiosidades referentes al equipo. La institución busca pasar un rato agradable con los pequeños de la región, inculcar los valores del deporte y sembrar afición por toda La Rioja. En esta temporada 2024-25 se llegará a 32 escuelas procedentes de 18 localidades.